Anoche escuché, de un amigo, una información muy importante sobre el bambú; no sabía que tardaba tanto en salir y mostrarse al mundo. Luego de hacer la siembra, el bambú se toma como 7 años en hacerce notar como una planta en sí; la cosa es que en unas 6 semanas el bambú crece de manera increible, además que esta planta es considerada como una de las más fuertes y por eso se la bautizó como el “acero vegetal”, por su resistencia.
¿Qué tiempo toma para que el águila pueda remontar un vuelo tan alto?, quizá muchos de nosotros obviamos la parte donde hay sacrificio, entrenamiento y dedicación para poder conseguir lo que se propone, volar mucho más alto de todas las demás aves y sin mucho esfuerzo. Muchos queremos que nuestro sueño se haga realidad rápidamente. Me quedo con este pensamiento, no todos los empredimientos y los sueños que tenemos tardan poco tiempo en hacerce reales. ¿Queremos una Bolivia diferente?, ¿quiéres alcanzar tu meta?… todo esto requiere tiempo, esfuerzo y entrega, no todos estamos dispuesto a pasar por eso.
Soñar simplemente es nada, soñar y actuar marca la diferencia; desde un sitio web de información, pasando por una web de servicios de tecnología, hasta un nuevo proyecto para la comunidad, una nueva empresa, publicar un libro, etc. todo conlleva sacrificio, todo requiere pasión.
en mi carrera estudiamos el bambu… y es un metodo alternativo para diferente tipo de estructuras muy interesantes y demas esta decir q muy ecologicas…
pasion!
mucha razon!
.)
Buen Post Willy, todo sueño puede convertirse en realidad si se trabaja en lograrlo, pero claro el trabajo no basta, o las ganas o el dinero que se le invierta, sino que la inteligencia, la vivesa, las buenas ideas, la innovación, y un arcoiris de iniciativas que pueden surgir en nuestra mente para lograr un solo sueño…todos esos factores llevan al triunfo de un emprendimiento.
La pasión, el amor…es lo que nos mueve a actuar…soñar es importante, pero más importante es hacer sus sueños realidad…
Seguàcon esa pasión…